Peña Kalimotxo 2 - Goiztiri 0

Después de haber sido 'trending topic' en la previa de Survivor Series con la heroica remontada ante el Boskozaleak (equipo que se ha abonado a los partidazos, esta semana 6-6, waw), el Goiztiri cayó en su visita a Usansolo ante el Peña Kalimotxo, que a su vez escala al liderato tras el tropiezo del Sestao. El 2-0 final, lejos de suponer un revés para nosotros, lo que hizo fue reafirmar nuestra propuesta futbolística: noble, solidaria y que prosigue su consolidación más allá de los resultados desfavorables.

Jugando de tú a tú y sin complejos ante un rival cuya peligrosidad conocíamos de antemano, planteamos un partido serio y comprometido, pese a las bajas del míster y del capitán. El Peña intentó desde el principio obstaculizar nuestra salida del balón con una presión bastante eficiente, que no obstante supimos sortear sin problemas. Bien puestos atrás en todo momento, nuestra tenacidad en defensa no se vio debidamente acompañada por el acierto en ataque, una cuestión que ha dado para escribir ríos de tinta en crónicas anteriores. De nuevo, la portería rival nos pareció de hockey-hielo, y cuando superamos ese trauma, convertimos en internacional al portero del Peña, que firmó un partidazo.

Con estas premisas, el partido pudo haber acabado 0-0 tranquilamente, y convertir nuestra visita a Usansolo en la clásica fuente de anécdotas graciosas. Cuando vuelves a Santurtzi y se produce la típica pregunta:
- ¿Qué habéis hecho?
- Empatar a cero...
- Ah, pero ¿vosotros no jugabais a fútbol-sala?

Y sí, perfectamente podríamos haber terminado el partido sin goles, un resultado que seguramente habría sido más justo para los dos equipos dados los merecimientos. Porque el partido, sin ser de los que crean afición como el de la semana pasada, fue ante todo un ejercicio de seriedad y de rigor táctico. Lo fue en todo momento, incluso cuando el Peña aprovechó un fallo de marcaje para marcar el 1-0 a puerta vacía. Ni siquiera entonces el Goiztiri se descompuso, de hecho seguimos creando peligro y, así a ojo, malo sería que el porcentaje de posesión no nos fuera favorable en los primeros 25 minutos.

La primera parte había sido buena y ni siquiera el gol encajado lograba reducir su valoración. No habíamos sido inferiores, quizá tampoco superiores; y nadie quería irse de vacío. Por eso, tras la reanudación, intensificamos la presión en campo rival, y esta vez no sólo merecimos empatar, sino también ponernos en ventaja. Se marraron goles cantados, faltó temple en la definición, y para terminar, la brusquedad hizo acto de presencia. Nada nuevo bajo el sol de Usansolo: en ese campo ya han caído heridos muchos espartanos y en esta ocasión le tocó a Kabe, víctima de un alevoso golpe en el pie. El partido se crispó, tal vez demasiado, pero no es nada que no le haya tocado alguna vez a otros clubes en sus enfrentamientos con el Peña Kalimotxo. Como dice el bueno de Ron Killings (foto): "And that's the whole truth!"

Pasada la fase de violencia extrema, tras haber fracasado en varios intentos claros de golear, apuramos la baza del portero-jugador, pero sin éxito. Jugamos con fuego y nos quemaron en la contra matadora que dio origen al 2-0. Un palo muy duro, pero más 'cornás' da el hambre y más patadas (?) el Bigoki. De ahí al final, que ya quedaba poquito, lo seguimos intentando sin fortuna, evidentemente no era nuestro día pero vaya, nobleza obliga... Con el pitido final, la consigna era clara: cabeza arriba, porque nuestro partido había merecido un mejor premio, que deberá esperar a otra ocasión. Y sí, en algunos sectores de la plantilla había cierto sentimiento de frustración, pero como siempre les digo, la vida siempre -o casi siempre- te concede un partido de vuelta para saldar viejas deudas.

Por desconocimiento, normalmente el aficionado de a pie piensa que los partidos de pocos goles han sido o bien una hez fecal o bien un canto al fútbol defensivo. Pues ni lo uno ni lo otro, con nuestros partidos nadie se aburre, porque uno ya empieza a intuir lo que somos realmente: the most electrifying team in sports entertainment. Tenemos capacidad de movilizar masas, tenemos carisma, tenemos calidad, compromiso y por eso nadie se agobia en una liga tan igualada, en la que palmas dos partidos y te vas al hoyo de cabeza. Sólo tenemos que afinar un poco la puntería para afianzar nuestra escalada en la tabla y ganarnos el derecho a vivir en un lugar digno de nuestra alcurnia. En este club no hay millonetis, sólo somos gudaris, tenemos nuestro orgullo, nuestra dignidad y vive Dios que vamos a conservarlas contra viento y marea.

Nuestro killer del área:

1. Maykel (6 goles)
2. Endika (5 goles)
3. Mayor II (3 goles)
4. Jon y Xabi (2 goles)
   
5. Kabe, Miki e Ibai (1 gol)

Nuestro seguro de vida:

1. Roblas (-13 goles)
2. Zazo (-13 goles/2 asistencias)
3. Medehayis Vendiduru (portero-jugador rumano) (-1 gol)