El ascenso, ¿meta o utopía?

Pues sí, ya lo veis. Con el presente artículo de opinión, os demuestro que el blog vale para algo más que para colgar crónicas. Como foro de reunión que es (porque supongo que para eso fue creado), debe servir para fomentar la comunicación, la discusión, el debate y el intercambio de ideas (vamos, justo todo lo contrario de lo que hago en mi trabajo en la plantación de algodón, donde sufro esclavitud moderna). Un foro de encuentro, todo ágora que se precie, en definitiva, ha nacido con el fin de publicar crónicas, reportajes, entrevistas… y, sobre todo, de crear opinión.

Durante la semana, en la medida de que el curro me lo permita y la inspiración de un genio sin musas se digne a aparecer, intentaré ir calentando la previa al partido del domingo. El cual, por si alguno no había reparado en pensarlo, nos enfrenta al líder del campeonato, la Juve. Por supuesto, no vamos a ser incendiarios contra ellos: no son los sordomudos, y eso ya les concede una oportunidad (que aquellos infraseres no tendrán jamás) para explicarse antes del juicio sumarísimo al que serán sometidos, ante su propia afición y una amplísima muestra de representantes del resto de equipos de la zona noble.

En ese juicio, nosotros no seremos espectadores, sino los fiscales. Y los fiscales acusan. Debemos ser acusadores. Debemos exigirles cuentas por el partido de la primera vuelta (con independencia de que uno u otro equipo sea el mejor, el resultado no marcó en absoluto la diferencia real entre ambos). Debemos ser severos, solidarios, agresivos, pero no por ello alocados. Debemos dar un puñetazo en la mesa y demostrar que es muy feo ir vendiendo ascensos antes de tiempo. Además de feo, es poco elegante, y la elegancia debe presidir el estilo de los fiscales (luego, otra cosa es lo que veamos en la realidad de los juzgados, porque la vida, ay jóvenes, no es como en Ally McBeal).

Por otra parte, el campo de La Benedicta (espero y deseo que sea el de arriba y no el cochambroso frontón, donde en modo alguno podría ni debería decidirse ningún campeonato de liga) se va a llenar. Es el partido que todos quieren ver, a la hora en que todos pueden verlo. Dicho de otro modo: es un escaparate magnífico para que saquéis el fútbol-sala que yo sé que lleváis dentro. El que, a falta de una mayor conjunción como bloque, es lo que nos ha permitido llegar hasta aquí. Eso y la casta, un factor sin el que uno no entiende el deporte, porque si no le ponemos casta al asunto, es mejor quedarse en casa. El domingo tenemos el partido de nuestra vida. Y después no cabe dormirse, sino pensar en el siguiente, afrontarlo con la misma intensidad o incluso más (yo al Peña le tengo muchas ganas). Y si salimos victoriosos, y si las Termópilas todavía resisten ante el empuje invasor, merecerá la pena ver vuestras caras en la última jornada, de la que ya tendré tiempo de contar cosas interesantes.

Por encima de las que hayamos podido llegar a preparar, los penaltis fallados, las broncas… seguimos siendo el Fútbol Samba Goiztiri. Tenemos cuentas pendientes; saldémoslas. La batalla se avecina dura, pero no debemos apelar sólo a la casta. Este tipo de eventos al final son para los listos, y este domingo tenemos que ser más inteligentes que nunca. Saber cuándo apretar, cuándo tirarse un poco atrás, cuándo morder, cuándo repartir y cuándo hacer un poco de fullería al estilo Caparrós. Como bien dijo el míster anoche: Juventud-Juventud-Juventud-Juventud. Eso es lo que hay que hacer: meterse al enemigo entre ceja y ceja. Un enemigo no puede ganarte, y si lo hace tendrá que dejarse la piel: sólo así encontraremos el descanso. Mientras siga habiendo opciones, y nos mantengamos plenamente mentalizados de que podemos pasar por encima de ellos (ninguno de los próximos rivales es el Playas de Castellón)… soñar es gratis, pero hay que pelear por que la utopía deje de ser utópica. Por eso, chavalería, porque entráis a este foro cultural en lugar de ver tías buenas en cualquier página guarrilla, porque en líneas generales habéis trabajado bien todo el año, porque no sois inferiores a nadie… Este llamamiento a las armas es para todos, pero especialmente para vosotros.

A ver qué se me ocurre mañana. Un abrazo para todos y AUPA GOIZTIRI!!!
AUUUUU AUUUUU AUUUUUU