El conmovedor derroche físico del Goiztiri mereció una mejor recompensa en Romo, aunque dadas las circunstancias estamos obligados a conformarnos con el puntito que logramos arañar en el feudo del segundo clasificado. Es decir, a ver la botella medio llena en vez de medio vacía y a dar por buena la recaudación, antes que lamentar los dos puntos que sin duda dejamos volar. Si algún equipo mereció ganar de verdad, ése fue el tercero por la cola. Todos los asistentes a Gobela lo vieron, y a ninguno de ellos le hubiera sorprendido. A este tramo final de campeonato hemos llegado como auténticas bestias y ahora es una pena decir que quedan sólo cinco partidos, cinco finales, para su conclusión. Sólo la desgracia impidió que los tres puntos regresaran a Santurtzi en el equipaje de vuelta, un impulso decisivo para rubricar una salvación que no terminamos de asegurar.La primera mitad, al estilo de la que jugamos en el mismo campo, ante el mismo rival, en la temporada precedente, pudo ser probablemente el banco de pruebas del mejor Goiztiri de la campaña. Sólidos arriba, llegamos a aburrir a Erromotarrak, creando peligro, robando balones y lanzando contras, pero fallando arriba como casi siempre. En ésas andábamos cuando Jon enganchó un duro disparo raso desde lejos que abrió el marcador. En el fin de semana más caluroso en lo que llevamos de 2013, el bochorno imperante en Gobela era abrasador, dando igual que el choque se disputase a las 19:30 horas. Y aunque esos primeros 25 minutos se nos hicieron eternos, no pudimos mantener la ventaja hasta el descanso, pues los locales empataron en otra acción similar a la del gol de Jon.
Hasta aquí llegó lo bueno, aunque en la segunda parte bajamos un poco el pistón. Ya antes del descanso el dominio visitante no era todo lo intenso que había sido desde el inicio. Dimos un paso atrás y el Erromotarrak, que si está donde está debe ser por algo, nos cazó en dos ocasiones a la contra. El partido entró entonces en una fase de intercambio directo de 'punches', pues a cada gol local respondimos de inmediato, con una frialdad impresionante. Jon, remachando una jugada individual de Maykel, y Xabi, llevaron el 3-3 al marcador. A partir de entonces imperó la locura, el partido fue mucho más correcalles y eso, unido al tremendo calor, a la presión, a lo mucho que había en juego, al inestable criterio del árbitro que nos perjudicó más que beneficiarnos (uno se irá a la tumba jurando que el número de faltas en esta segunda parte, que fue mas bronca con diferencia, superó las cinco con claridad, por no hablar de un penalti por no señalizado por mano, pero en fin... that's what they do and that's why they're here) encaminó nuestra misión hacia un vórtice de emociones, un derroche de pasión y de facultades en el que fue muy difícil encontrar la calma mental necesaria para culminar el buen juego que, sin duda, realizamos ayer. Dos balones estrellados en el palo, más la jugada casi al final en la que Xabi estuvo cerca del gol, certificaron nuestro gafancio.
Con lo que seguimos exprimiendo la máquina de entrenar en la que, sin duda también, nos hemos convertido, en busca de una nueva víctima. Lau Lagun, tercero en la tabla, visita La Kubitera Hell's Gate este próximo sábado. El calendario no da tregua, pero nadie la ha pedido. En esta guerra no se hacen prisioneros, la lucha será a muerte y aunque la palabra 'muerte' suene a descanso eterno, no nos preocuparemos porque, como asegura el prestigioso parapsicólogo Doctor Harry Deadman en su ensayo 'The dead will rise'... aquí ya hay quien ha demostrado que no descansará jamás, ni siquiera después de muerto. El gen espartano subyace de nuevo, nos sentimos fuertes pese a nuestra vulnerable situación clasificatoria, y ahora nos topamos con que quedan cinco partidos para el Gran Perdón (The Great Forgiveness). Cuando se acabe la música y se apaguen los focos, en algunos casos para siempre, habrá (esperemos) una permanencia que celebrar, alguna baja que lamentar y un futuro que encarar con optimismo gracias a nuestros juveniles, en el que no tendrán cabida los errores del pasado. Ni siquiera los del pasado reciente.
ANEXO (SIN DERECHO A SEXO): Al hilo de lo cual, el equipo juvenil inició su fase de campeones con una derrota en casa ante el Sestao (1-2). Un duro mazazo pero nuestros chavales son buenos y saldrán adelante, porque ocurra lo que ocurra, ganen, pierdan o empaten, ellos ya han ganado, ya han hecho historia en el club y sólo por eso ya valoramos mucho su trabajo. Por eso, esperamos cuatro victorias en los otros tantos compromisos restantes. Sin complejos. (Por cierto, bochornosa, abominable y querellable actuación en este encuentro del colegiado Emilio Eduardo de la Mata Idiáñez, also known as Calamity, una muesca de incompetencia más en su largo memorial de agravios no ya contra el FS Goiztiri, sino por extensión contra toda la raza humana)
1 comentario:
Este equipo me esta sorprendiendo parece que han tocado la tecla necesaria, jugando de tu a tu a los gallitos de la liga y en muchos casos siendo mejores, seguro que este sábado el lau lagun viene con miedo.
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